Descubierto! A ver, no es un descubrimiento reciente, ni que haya quitado tiempo a los estudiantes de Harvard o a los avances de la Medicina Nuclear, pero por fin podemos ponerle nombre a ese sentimiento de creer en una persona tanto y tan fuerte, que le ayude a conseguirlo. Si my friend, tu palabra vale, y vale mucho. Tener expectativas sobre alguien y hacérselas saber tiene su consecuencia.
Seguro que te ha pasado que alguien de tu entorno tenía un negocio/exámen/oposición/entrevista entre manos casi imposible pero que todos apostaban por el de manera muy fuerte, y finalmente a modo de superhombre/semiDios va y lo consigue!
Pues date las gracias, porque tu tambien tienes mucho que ver en ese empujón y se llama “Efecto Pigmalión” (suena tan rara que hasta el autocorrector se asusta), y es algo que de algún modo todos hemos usado, pero que sin embargo nunca nadie te lo ha explicado.
Consiste en creer en otro. De hecho, mira la responsabilidad tan grande que tienes ahora, que deberías llamar a ese amigo que está tirado comiendo el delivery del McDonalds en el sofa de su casa con la batamanta y pensando en que su vida es una mierda y que jamás conseguirá eso que tanto quería… Te toca!
Demuestrales tu efecto, haz que tus palabras empujen sus metas.

Vía Pulptastic